Tema del día: Un nuevo intento de extorsión contra El Establo
Policía acribillado

Dos detenidos seguirán en prisión hasta el juicio

Brian Brito y Mariana Meyer sumaron una nueva imputación, por tenencia de armas de fuego de guerra, tras el atentado a tiros contra el suboficial de Policía que desde hace un mes pelea por su vida en el Heca.


Las dos únicas personas mayores de edad detenidas por el atentado a tiros contra el suboficial Gabriel Sanabria durante un control policial de rutina en Ayolas al 400 continuarán en prisión preventiva por un plazo de dos años o hasta la celebración del juicio. Así se resolvió esta tarde en una audiencia celebrada en el Centro de Justicia Penal.

Este lunes se llevó adelante audiencia de revisión de medida cautelar a Brian Nahuel Brito (30 años) y Mariana Soledad Meyer (41) por los delitos de encubrimiento doblemente agravado en calidad de coautores y en grado consumado; y nueva imputativa por tenencia de arma de fuego de guerra.

La fiscal Gisela Paolicelli, de la Unidad de Homicidios Dolosos, solicitó la prórroga de la prisión preventiva efectiva. Asimismo les imputó haber tenido bajo su esfera de custodia y en condiciones inmediatas de uso y disposición una pistola ametralladora PMA3, calibre 9mm, un dispositivo de disparo de fabricación casera calibre 9 mm, y dos pistolas calibre 9mm marca Taurus.

Las armas se encontraban en la casa de Ayacucho y Hungría. Fueron secuestradas el pasado 28 de mayo por personal policial cuando realizaban un rastrillaje por la zona, tras una persecución en flagrancia de jóvenes que se daban a la fuga por los techos de las viviendas linderas, tras cometer el demencial ataque a tiros contra el policía Gabriel Sanabria.

Aunque la defensa de los imputados se opuso al pedido de la Fiscalía de prorrogar la prisión preventiva efectiva, la jueza María Melania Carrara dispuso que ambos imputados queden encerrados hasta la audiencia preliminar al juicio.

En la audiencia del pasado 29 de mayo, la fiscal Paolicelli les había imputado a Brito y Meyer los delitos de encubrimiento doblemente agravado, siendo que la comisión de un delito ejecutado por otras personas, como fue la tentativa de homicidio calificado por el uso de armas de fuego y agravado por perpetrarse contra un miembro de las fuerzas de seguridad policial, en el que ambos no habrían participado.

La noche del 27 de mayo, en circunstancias en que un menor de edad llamado Héctor G. huía de personal policial, Brito y Meyer lo ayudaronn a eludir el accionar de la justicia, ocultándolo en el interior de su casa, cuando se escapaba por los techos linderos y era perseguido por efectivos que realizaban un rastrillaje tras el atentado contra Sanabria.

Además se les atribuyó haber recibido y ocultado una mochila color gris oscura, que contenía en su interior una pistola ametralladora PMA3, calibre 9×19 sin numeración visible, un dispositivo de disparo de fabricación casera calibre 9 mm, una pistola calibre 9×19 de doble y simple acción marca Taurus, una pistola 9×19 marca Taurus, la cual se encontraba en el patio interior de la vivienda donde pernoctaban.